LA VERDADERA RIQUEZA
En nuestro primer nacimiento, nadie tiene elección, nacemos de padres pobres, de padres ricos, en naciones pobres o en naciones ricas, de padres blancos o negros, no podemos elegir.
Todos sabemos que vamos a morir, pero vamos a resucitar, y esta ves podemos elegir nuestro nacimiento, si nacemos de Dios para vivir feliz por toda la eternidad o para nacer viviendo peor que ahora, no es lo mismo vivir en este mundo de muerte , desolación, guerras y pestes por todas partes.
La cuestión es que, para nacer de Dios, tenemos que practicar su palabra, y Dios mismo será nuestro maestro, así estás escrito, si lo hacemos, vamos a nacer de nuevo como hijos de Dios y todo lo que eso significa, si no lo hacemos, vamos a nacer para un sufrimiento peor que el de este mundo.
Jesús vino a traernos la palabra de Dios y dio su vida por nuestra salvación, vino para salvarnos, a nosotros no al mundo ni las cosas de este mundo.
ESTO ES LO QUE DICE JESUS:
LUCAS 12
13 Uno de la gente le dijo: "Maestro, di a mi hermano que reparta la herencia conmigo."
14 El le respondió: "¡Hombre! ¿quién me ha constituido juez o repartidor entre vosotros?"
13 Uno de la gente le dijo: "Maestro, di a mi hermano que reparta la herencia conmigo."
14 El le respondió: "¡Hombre! ¿quién me ha constituido juez o repartidor entre vosotros?"
Jesús no vino a repartir riquezas de este mundo, sino a darnos las riquezas del cielo y una vida eterna mejor que la de un magnate, si vivimos cómodamente terminamos enamorándonos de este mundo y perdemos el Cielo.
15 Y les dijo: "Mirad y guardaos de toda codicia, porque, aun en la abundancia, la vida de uno no está asegurada por sus bienes."
16 Les dijo una parábola: "Los campos de cierto hombre rico dieron mucho fruto;
17 y pensaba entre sí, diciendo: "¿Qué haré, pues no tengo donde reunir mi cosecha?"
18 Y dijo: "Voy a hacer esto: Voy a demoler mis graneros, y edificaré otros más grandes y reuniré allí todo mi trigo y mis bienes,
19 y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes en reserva para muchos años. Descansa, come, bebe, banquetea."
20 Pero Dios le dijo: "¡Necio! Esta misma noche te reclamarán el alma; las cosas que preparaste, ¿para quién serán?"
21 Así es el que atesora riquezas para sí, y no se enriquece en orden a Dios."
La verdadera riqueza consiste en dejarnos instruir por Dios, solo de esta forma podremos vivir en el Cielo, feliz y eternamente.
0 comentarios