EL PODER DE LA PALABRA
El poder de la palabra es tremendo, puede cambiar nuestra forma de ver las cosas, tergiversar lo bueno en malo y lo malo en bueno, puede ser beneficioso o muy perjudicial, puede cambiar el carácter de las personas,
Las sugestiones inspiradas mediante la palabra producen el placer y apartan el dolor. La fuerza de la sugestión se adueña de la opinión del alma, la domina, la convence y la transforma . Son dos artes de fascinación y de encantamiento , las cuales sirven de extravío al alma y de engaño a la opinión. ¡Y cuántos han sidos engañados y engañan a cuántos y en cuántas cosas con la exposición hábil de un razonamiento erróneo! Si todos los hombres tuvieran completo, conocimiento del presente ese razonamiento no podría engañarlos del modo como lo hace. Por eso es necesario conocer el presente y el pasado . la mayor parte de los hombres y en la mayor parte de las cuestiones toman la opinión como consejera del alma. Pero la opinión, siendo incierta e inconsistente, arroja a los que se sirven de ella en infortunios e incertidumbres
En efecto, la palabra que persuade el alma obliga necesariamente a esta alma a obedecer sus mandatos y a aprobar sus actos. Por tanto, el que infunde una persuasión, que priva la libertad de razonar, obra injustamente, pero quienes son persuadidos ? - La misma proporción hay entre el poder de la palabra respecto a la disposición del alma que entre el poder de los medicamentos con relación al estado del cuerpo. Así como unos medicamentos expulsan del cuerpo los estados de ánimos distintos, unos eliminan la enfermedad y otros la vida, así también unas palabras producen tristeza, otras placer, otras temor, otras infunden en los oyentes coraje, otras mediante una maligna persuasión engañan el alma.
MARCOS 7
14 Y Jesús, llamando otra vez a la gente, les dijo: "Escúchenme todos y entiéndanlo bien.
15 Ninguna cosa externa que entra en el hombre puede mancharlo; lo que lo hace impuro es aquello que sale del hombre.
15 Ninguna cosa externa que entra en el hombre puede mancharlo; lo que lo hace impuro es aquello que sale del hombre.
Se entiende que Jesús se refiere a la palabra que sale de nuestras bocas.
16 ¡Si alguien tiene oídos para oír, que oiga!".
17 Cuando se apartó de la multitud y entró en la casa, sus discípulos le preguntaron por el sentido de esa parábola.
18 Él les dijo: "¿Ni siquiera ustedes son capaces de comprender? ¿No saben que nada de lo que entra de afuera en el hombre puede mancharlo,
16 ¡Si alguien tiene oídos para oír, que oiga!".
17 Cuando se apartó de la multitud y entró en la casa, sus discípulos le preguntaron por el sentido de esa parábola.
18 Él les dijo: "¿Ni siquiera ustedes son capaces de comprender? ¿No saben que nada de lo que entra de afuera en el hombre puede mancharlo,
Jesús se refiere a la comida
19 porque eso no va al corazón sino al vientre, y después se elimina en lugares retirados?". Así Jesús declaraba que eran puros todos los alimentos.
20 Luego agregó: "Lo que sale del hombre es lo que lo hace impuro.
21 Porque es del interior, del corazón de los hombres, de donde provienen las malas intenciones, las fornicaciones, los robos, los homicidios, 22 los adulterios, la avaricia, la maldad, los engaños, las deshonestidades, la envidia, la difamación, el orgullo, el desatino.
23 Todas estas cosas malas proceden del interior y son las que contagian al hombre".
20 Luego agregó: "Lo que sale del hombre es lo que lo hace impuro.
21 Porque es del interior, del corazón de los hombres, de donde provienen las malas intenciones, las fornicaciones, los robos, los homicidios, 22 los adulterios, la avaricia, la maldad, los engaños, las deshonestidades, la envidia, la difamación, el orgullo, el desatino.
23 Todas estas cosas malas proceden del interior y son las que contagian al hombre".
No se dejen engañar dice el Señor
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