INUTILIDAD DEL CULTO SIN LA PRÁCTICA DE LA JUSTICIA

 
10 ¡Escuchen la palabra del Señor,
jefes de Sodoma!
¡Presten atención a la instrucción de nuestro Dios,
pueblo de Gomorra!

 

Es evidente que no se está dirigiendo a esas dos ciudades, las mismas desaparecieron por medio del fuego  cientos de años antes,  pero por analogía se dirige a nosotros,  es decir que Dios nos ve como émulos de los habitantes de esas dos ciudades que fueron consumidas por causas de su corrupción extrema.

11 ¿Qué me importa la multitud
de sus sacrificios? –dice el Señor–.
Estoy harto de holocaustos de carneros
y de la grasa de animales cebados;
no quiero más sangre
de toros, corderos y chivos.

 

¿ somos realmente creyentes  ?  pero,  ¿ de que manera conocemos a Dios ?   acaso a Dios  puede gustarle esas clases de sacrificios ?  - no tiene ningún sentido. 

12 Cuando ustedes vienen a ver mi rostro,
¿quién les ha pedido que pisen mis atrios?

13 No me sigan trayendo vanas ofrendas;
el incienso es para mí una abominación.
Luna nueva, sábado,convocación a la asamblea...
¡no puedo aguantar la falsedad y la fiesta!

 

La verdad es que somos hipócritas,  traemos ofrendas, celebramos fiestas y aniversarios, pero no hacemos lo que Dios pide,   A los reyes les puede gustar las adulaciones,  pero a Dios,  ni pensarlo..

14 Sus lunas nuevas y solemnidades
las detesto con toda mi alma;
se han vuelto para mí una carga
que estoy cansado de soportar.

 

¿ Creen ustedes que adulando a Dios vamos a conseguir algo ?  o aprender sabiduría ? - es absurdo.

15 Cuando extienden sus manos,
yo cierro los ojos;
por más que multipliquen las plegarias,
yo no escucho:
¡las manos de ustedes están llenas de sangre!

 

De nada sirve nuestras plegarias si somos injustos, codiciosos y violentos. pero la gente ignora  estas cosas ni la quieren oír,  sufrirán las consecuencias de sus errores,  por no mirar por donde caminamos, podemos tropezar y rompernos una pierna,  pero no digan, Dios me castigó,  el castigo es consecuencia de nuestros errores o pecados.

16 ¡Lávense, purifíquense,
aparten de mi vista
la maldad de sus acciones!
¡Cesen de hacer el mal,
17 aprendan a hacer el bien!
¡Busquen el derecho,
socorran al oprimido,
hagan justicia al huérfano,
defiendan a la viuda!

 

Si obedecemos estas recomendaciones,  veremos el buen resultado, todo nos irá bien.

18 Vengan, y discutamos
–dice el Señor–:
Aunque sus pecados sean como la escarlata,
se volverán blancos como la nieve;
aunque sean rojos como la púrpura,
serán como la lana.

 

Dios no rechaza al pecador,  lo que quiere es que el Hombre reconozca sus errores y se acerque a Dios y le pida su ayuda.  además  Dios no cobra nada, todo lo da gratis.

19 Si están dispuestos a escuchar,
comerán los bienes del país;
20 pero si rehusan hacerlo y se rebelan,
serán devorados por la espada,
porque ha hablado la boca del Señor.

 

Dios no se equivoca nunca,  lo que Dios dice sucederá, pero nos da la opción  de evitar los males haciendo el bien.   Somos libres,  lo que nos suceda será  justo,  mal por mal - bien por bien.